LO PROHIBIDO
Solo queda el recuerdo, y discúlpenme si no se los puedo platicar,
pero es que de esto no debe hablarse, esta prohibido, y no crea que es solo
porque los muertos no hablamos, no, es que de veras aunque no exista una ley
sobre esto, todo mundo sabe que de este tema está prohibido hablar?, ni los vivos , que a lo mejor ya ni se
acuerdan de tanto pensar en que no paso, y los muertos? esos si nos acordamos, pero como no hablamos más que entre nosotros
mismos, pues en ocasiones tratamos de
meternos en las cabezas de los vivos y susurrarles lo que en realidad paso por
estos montes, por los antiguos caminos
hacia la frontera, tan recorridos en
otros tiempos con el afán de huir , de salvar lo que quedaba de valor, junto con la familia y cruzarlo al otro lado
de este mar de montañas, era
como la tierra prometida en esos duros tiempos, en que desde las ciudades hasta los pueblos
olían a sangre y ese olor lo llenaba todo, en esos tiempos era
curioso porque la lucha era uno contra todos y todos contra uno y es que había
tantos unos y tantos todos que en cada esquina se corría el riesgo de recibir
una puñalada, , palos hasta morir o un par de balazos, simplemente caían en el
día al ser alcanzados por los disparos desde un auto, o amanecían los cuerpos
en las cunetas de callejuelas y caminos
, fríos y con su propio charco de sangre, por eso se prefería huir , porque los
unos huían de los otros y con el tiempo los
otros huirían de los unos , pero
de todo esto no se habla, incluso figúrese
usted que cuando estaba
sucediendo, no se hablaba, no, nadie
decía nada, ni se daban instrucciones,
como si todas las personas que intervenían ya supieran lo que tenían que hacer
y daba la impresión que como que antes
de que pasara ya lo querían olvidar pues no decían nada, si acaso se escucharía y seria lo que quedaría en la memoria un
golpe seco, no muy fuerte y un gemido
que se iría apagando conforme la tierra fuera absorbiendo la sangre que manaba
de ese cuerpo, que quedaría ahí a la intemperie en ocasiones contadas les
pondrían algunas ramas por encima como queriendo cubrirlos , pero era inútil
los cuerpos serian carne para los depredadores y los huesos quedarían
diseminados por los propios animales que se los llevarían a sus cueva en donde jamás los encontrarían, en esos
tiempo era como si todos nos hubiéramos vuelto de piedra, si, con el corazón
duro , porque a la hora de la faena que normalmente era en las primeras horas
del amanecer antes de que aclarara, cuando el sueño es más pesado, y se
comenzaba el trabajo, uno no distinguía hombre, mujer o niño, solo se le
dejaba hundir el puñal al bulto que se tenía
enfrente , yo al menos pensé siempre que no lo sentían que solo pasaban de un sueño
a otro, así me toco hacer muchas faena tantas que ni me acuerdo, pero dejo
beneficios, que venían muy bien en esos
tiempos , si, pa que voy a mentir se ganaba dinero y algunos hasta ricos se
hicieron , era cuestión de suerte ,
dependía que tan rica era la gente que se transportaba, unos con poco otros con
mucho, pero todos pagaron su pasaje con algo más que sus bienes, y hoy me
acuerdo solo porque usted lo pregunta, pero la verdad es que ya ni me acordaba
yo creo que ni a los que les toco quedarse en esos montes, se acuerdan ya, o a lo mejor sí,